jueves, 27 de febrero de 2014

Vaslav Nijinsky, el clown de dios.






Bailarín y coreógrafo ruso, nacido en Kiev, Vaslav Nijisnky es considerado la más grande estrella de los ballets rusos, que en apenas diez años de carrera, se instauró como uno de los mayores mitos del Siglo XX.


El “Dios de la danza”, el “clown de Dios”, para muchos, considerado una de las figuras más revolucionarias en el mundo de la danza y, quizá, el mejor bailarín del siglo XX, se hizo célebre por su virtuosismo y por la profundidad e intensidad de sus caracterizaciones pues su especial personalidad lo hacia ser diferente y atraía poderosamente. 


Ha sido un personaje rodeado de leyenda desde el inicio de su carrera como artista. Como bailarín, celebrado por su virtuosismo y técnica perfecta, podía realizar el "en pointe" (es la acción del levantamiento a las extremidades de los dedos del pie), una rara habilidad entre los bailarines de su tiempo y su habilidad para realizar saltos que evidentemente desafiaban la gravedad.; como coreógrafo, creador de un nuevo concepto de la danza que supuso, para algunos autores, ser el iniciador o el padre de la danza moderna y, como hombre, un revolucionario que sorprendió a la sociedad y cultura oficial del momento, sacudiendo el molde académico y cosificado del mundo artístico y social. No obstante, el temprano final de su carrera a causa de sus alteraciones mentales, acabó de elevar su figura a la categoría de mito.




Era el segundo hijo de Thomas Laurentiyevich Nijinsky, también un eximio bailarín que fue muy celebrado por su virtuosismo y por sus saltos espectaculares. Los Nijinsky tenían su propia compañía de baile y recorrían con ella la Rusia de los zares. Toda la familia, incluyendo a Vaslav y a sus dos hermanos, Stanislav y Bronislawa, interpretaba distintos ballets clásicos. Pero el talento de Vaslav ya sorprendía a edad muy temprana y cuando sólo tenía nueve años de edad su padre lo llevó a la Escuela Imperial de San Petersburgo.


Un momento decisivo para Nijinski fue su encuentro con Serguei Diaghilev, un miembro de la élite de San Petersburgo e importante patrón de las artes, que promovía el arte visual y musical de Rusia en el extranjero, particularmente en París. En 1909 Serguey Diaghilev, asistente del administrador de los teatros imperiales, fue comisionado para organizar una compañía que reuniera a las estrellas de los dos teatros y luego esta nueva compañía viajó a París con Nijinsky como figura principal. Como parte de esa trouppe (compañía) interpretó: Arlequín, Carnaval, sobre piezas de Schumann y Scherazade, de Rimski, donde Nijinsky deslumbro en el papel del esclavo negro, exquisito y felino, sensual y energético, brillante de saltos lentos y gigantesco de presencia escénica a pesar de su corta estatura y su delicada complexión, un mimo y un danzarín como no se había visto nunca, Les Sylphides, Spectre de la Rose este ballet se estreno el 19 de abril de 1911 junto con Tamara Karsavina, la interpretación de Nijinsky según sus palabras era expresar por medio de su danza la belleza, la pureza del amor, el amor en el sentido divino, Schéhérezade la interpretación de este ballet estuvo a cargo de Ida Rubinstein como Zobeida y Nijinsky como el esclavo el cual puso en evidencia la naturaleza animal del amor y el maestro Cecchetti como jefe de los eunucos, este ballet fue el espectáculo símbolo de los Ballets Rusos, y Narciso de Cheperin en donde Nijinsky podía dar la impresión de un alucinado y su locura se manifestó en paranoia, entre otras obras.

El cuerpo de Nijinsky no respondía a los cánones del ballet clásico, sus músculos estaban demasiado desarrollados. Apenas tocaba el suelo con la punta del pie para prepararse para el paso siguiente, se apoyaba no sobre los pies sino únicamente sobre las uñas y buscaba el impulso en un profundo plié… En 1912, con la creación de su primera coreografía “La siesta de un fauno”, revolucionó la danza y la llevó hasta sus principios fundamentales. Eliminó los gestos sinuosos y sólo permitió los pasos absolutamente esenciales. Con estas obras, quedo atrás el ballet de hadas y ninfas y pasó a primer plano el cuerpo vivo, sexuado y contorsionado del bailarín moderno.



Su clara dependencia, tanto sentimental como profesional de Serge Diaghilev – el hombre que le había abierto las puertas al triunfo y la creación – y de los propios Ballets Russes, tuvo un precipitado y dramático final tras su sorprendente boda con Romola de Pulszky, una joven de origen polaco, también miembro de la compañía.  El comienzo de la Guerra Mundial le sumió en un período de aislamiento e inactividad que inexorablemente, le llevó a la locura. Posiblemente, su único medio de libertad era el escenario, y al verse fuera de él no fue capaz de soportar la realidad. En 1919 fue visto en escena por última vez e inmediatamente después se adentró en un sinfín de tratamientos médicos que le acompañaron hasta su muerte en Londres en 1950.

La figura de Nijinsky se nos presenta, aún hoy, como una transgresión de locura y genialidad, belleza y dolor.



A continuación podemos observar fragmentos de sus obras y de su excelente técnica: 



La bibliografia usada ha sido la siguiente: 

http://www.buscabiografias.com/bios/biografia/verDetalle/2747/Vaslav%20Nijinski

https://sites.google.com/site/laredanzaudg/personajes/del-mundo/vaslav-nijinski

http://www.taringa.net/posts/info/13521108/Locura-y-talento-Vaslav-Nijinsky.html

http://www.biografiasyvidas.com/biografia/n/nijinski.htm

http://www.investigartes.com/inicio/index.php?option=com_content&view=article&id=86:vaslav-nijinsky-un-genio-a-partir-del-analisis-de-su-narrativa&catid=36&Itemid=72

http://www.hagaselamusica.com/clasica-y-opera/ballet/vaslav-nijinsky/


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